domingo, 18 de agosto de 2013

TORNILLOS BAJOS DEL GUALAY, CERRA DE LA CANALIEGA.


CIRCULAR NAVA DE SAN PEDRO, ARROYO DE LOS TORNILLOS BAJOS DEL GUALAY, CERRA DE LA CANALIEGA.



  Desde la izquierda arriba: Chotillo, Calígine, Chaparro, Drago y Córvido Carcávico.
 Abajo: Zorro Ártico, Halcón Peregrino y Macho Cabrío.

  Estos ocho socios del CD Senderista "LOS ESCUDEROS" de RUS, os saludan y ofrecen esta sensacional circular.
  
  Partimos desde la Nava de San Pedro, por la pista que pasa al lado del centro de cría del quebrantahuesos, subiendo hacia los Pechos de Majá Cándido desde dónde hay unas preciosas vistas de todo el valle del Guadalentín, adivinándose las cerradas que luego recorrimos.

   Un poco más adelante hicimos una inclusión a la zona alta de la también llamada Lancha del Sabinar (abrupto parapeto norte de la Cerra de la Canaliega) para comprender como el salvaje Arroyo Gualay, rompe una de las cuerdas más larga del Parque, estrellándose en la pared que baja de la meseta de los cortijos de Poyo Tribardo. 

  A continuación retomamos la senda que en zigzag nos baja hasta el llamado puente de La Canaliega, dónde almorzamos, nos cambiamos de ropa y nos metimos en el sin par ARROYO DE LOS TORNILLOS BAJOS DEL GUALAY. Fuimos ascendiendo primero disfrutando de sus pozas, cascadas y cerradas, siempre por dentro del agua, con continuos baños y algunos saltos, hasta llegar a un lugar por el que ya no pudimos continuar, que se estrechaba y que nos dejó con muchas ganas de conocerlo. Luego bajamos de nuevo a la base que instalamos al lado del puente y tras coger las mochilas nos dirijimos ahora ya corriente abajo en busca del Río Guadalentín.

  En el primer tramo bajamos por la senda de la orilla, con el Gualay a la izquierda, pasando por los restos del Cortijo de La Canaliega y de nuevo al agua, hasta llegar a un difícil paso, que con la ayuda de dos maderos y con la concentración al unísono del grupo logramos pasar casi sin riesgo.

   Una vez pasado el escollo, la ilusión desborda al grupo ante la belleza de este tramo final del Arroyo de los Tornillos del Gualay con el Río Guadalentín. En el corazón de la Cerrá de La Canaliega las formas rocosas, las cascadas, las pozas son extraordinarias y las disfrutamos en forma de innumerables baños y saltos.

 Más tarde iniciamos la vuelta por el sendero llamado "Senda de Los Pescadores", Guadalentín arriba, hasta llegar a un ribera llena de fresnos a cuya sombra nos equipamos de nuevo con ropa de senderismo. Pasamos por el viejo puente que cruza el Arroyo San Pedro, que no es otro que la suma de los arroyos de La Garganta y de la Rambla. A nuestra derecha dejamos el Guadalentín  en la zona del Vado de las Carretas.
  
  El tramo final lo hicimos en subida por una pista y después senda, aprovechando las sombras de un viejo bosque mediterráneo hasta llegar al lugar de inicio, el bar de nuestro paisano Antonio Cabrero, dónde tomamos un reconfortante refrigerio.





             
             DOMINDO 18 DE AGOSTO DE 2013.




    Iniciando la ruta, con el Centro de cría del quebrantahuesos a nuestra espalda. Como pueden observar Macho Cabrío viene un poco atrás, muy pensativo.




   "Una oficial", que es como dentro del lenguaje del grupo, llamamos a una foto en la que aparecemos todos loa componentes de la expedición. Esta está tomada en los Poyos de Majá Candido.




    Desde dónde se nos ofrecen estas sensacionales vistas del valle del Guadalentín.




   Hay una vieja deuda que Calígine tenía con el tramo final del Arroyo Gualay. Es una vieja historia que algún día le contaremos.
 Como fondo el valle del arroyo que parece estar protegido por peligrosos lapiaces que  hacen muy difícil el poder contemplarlo desde arriba.




   Halcón Peregrino tiene unas enormes ganas de hacer una ruta acuática. Desde los Poyos de La Lancha del Sabinar, está empapándose de lo que pronto será una gran experiencia. 




     El grupo en la parte final de la bajada hacia el agua.




    Tras dejar los bártulos junto al puente de la Cerrá de la Canaliega, comienza la ascensión Gualay arriba. Zorro Ártico a la primera oportunidad se lanza, tras una larga ausencia, irrumpe con una vitalidad que nos contagia y empapa.










   Zorro Ártico y Halcón Peregrino, han sido los primeros en tomar contacto con estas frías aguas, llevan a nuestro fotógrafo con la lengua fuera.




    Esta refrescante hornacina es una referencia para el grupo. En la ruta que hicimos por aquí el año pasado, Córvido Carcávico creó el referente. Por fin Calígine va a conocer este tramo.




    Drago se suma con gran entusiasmo a esta foto para el recuerdo.




    Poco a poco todos los componentes de la expedición, tras ir adaptando la sangre a las frías aguas, deciden darse unos baños.




   Mientras Zorro Ártico y Halcón Peregrino continúan abriendo camino cual expertos anfibios.




   Halcón Peregrino ahora si que se está empapando de Gualay. Aquí lo vemos reconfortando los músculos en este jacuzzi propio de dioses.




   Drago ya no ha podido aguantar más ante tan provocativas pozas.




      Tenemos que decir que nuestro CD "LOS ESCUDEROS" lleva el olimpismo muy arraigado, por lo que hoy vamos a aprovechar para preparar un fuerte equipo de saltos de distintas alturas, con la intención de llegar con las mayores garantías de éxito a RÍO-2016.
  Aquí vemos como el capitán del equipo, Zorro Ártico se lanza desde este inigualable trampolín de CINCO METROS MENOS UNA CUARTA, categoría que aún no es olímpica pero que para depurar la técnica nos viene muy bien.




   Que destreza la de Halcón Peregrino que tras dar el doble mortal intenta clavar la entrada al agua.




    El sector masculino del Club siempre quiso trabajar la sincronizada, pero en este sentido nos sentimos un tanto marginados, ya que sólo es olímpica para féminas. De todas maneras nos queda un gran trabajo por hacer, sobre todo estético.




   En este lugar hemos dejado a estos cuatro componentes para que perfeccionen el salto de trampolín de CUARTA Y MEDIA, mientras el equipo de los grandes saltos busca los trampolines adecuados a esta nueva disciplina arroyo arriba.




    Estos trampolines sólo existe aquí. Nuestras estrellas llevan a nuestro fotógrafo casi sin aliento. No sabemos como lo hace, pero aunque el sube empapado "LA GRANATE" (nuestra máquina de fotos) está totalmente seca. 




   Vaya día de agua que os estáis dando los dos.




   Merecido homenaje a nuestro fotógrafo Córvido Carcávico, al que no le ha dado tiempo ni de quitarse la camiseta. El bastón ya hace que lo perdió y reposa sumergido en una anterior poza.




    Hasta aquí llegamos, quedándonos con unas inmensas ganas de haber continuado. El arroyo cada vez se estrecha más en esta zona. Volveremos.




   Arroyo abajo buscando el reagrupamiento.




   Al fondo se aprecia al entrenador Chaparro tumbado, aprovechando para tomar el sol, tras haber decretado unos minutos de descanso. Hay quién dice que está así de blanco porque duerme en una nevera.




    ARROYO
Poema publicado el 10 de Noviembre de 2008.

 En la prisa de su ímpetu tiránico
No oye nada el arroyo
Desde el foso sin bordes de su propio fragor
Desde aquí arriba
Se ve el tropel de espaldas líquidas
Sin cesar arrojándose
Con la monótona constancia
De un perpetuo desorden

Esta vehemencia se abalanza
Hacia un túnel del tiempo
Que no debiera tener término

El arroyo perpetuamente empieza
Por siempre su después es siempre ahora

¡Ah sí! resiste
No te dejes salvar por mis palabras
No cedas uno solo de tus ansiosos rasgos
A la imagen de ti
En la que te amaré luego

Te juro que estoy mirándote
Fuera de este poema
Donde corro contigo
Abrazado a un impulso y ciego a toda meta

Queriendo que mi vida igual que tú
No sepa nunca donde acaba el tiempo.

                            Tomás Segovia





     Seguimos arroyo abajo.




   Nuestro entrenador Chaparro siempre busca la perfección. No ha podido elegir un lugar más idóneo.




   Nuestra admirada hornacina dónde reposan para su transformación algunos enormes troncos.




    Calígine lleva un verano pero que muy acuático.




    Por fin aparece nuestro compañero Macho Cabrío, gran seguidor del grupo musical "La Cabra Mecánica". Por la mañana andaba algo espeso, ya que vivió en directo la verbena de Arroyo Frío, pero estas aguas le harán recuperar el tono rápidamente.




   Se acabó el descanso, nuestro entrenador Chaparro reanuda el trabajo. Aquí les ofrecemos este espectacular salto de trampolín de DOS CUARTAS Y MEDIA, realizado por Chotillo.




   Nuestro capitán Zorro Ártico poco antes de clavar la entrada, tras realizar dos giros mortales y una extraña pirueta que le ha despegado un tanto el brazo izquierdo. Chaparro observa para corregirlo.




   El nuevo fichaje Macho Cabrío nos pone los pelos de punta ante tanta destreza. No conocíamos esta faceta suya mezcla de habilidad y contundencia. Mientras se lanzaba se le oyó decir "Ave César, morituri os salutan"




    Aquí nuestra estrella del equipo de Waterpolo a cuatro Calígine se la juega en este arriesgadísimo salto. Por si acaso allí estaba el solidario Halcón Peregrino.




   Estos dos aunque tienen diferentes edades, ya hace que se conocen. Su buena relación de siempre se está fortaleciendo dentro del club.
  Es tan transparente como estas chorreras que del corazón de la montaña van aumentando el caudal de su amistad.




   Hoy no hemos reparado en gastos. Las chorreras que aquí se unen al Gualay, aportan al grupo unos carísimos chorros de hidromasaje, llenos de frescura y vitalidad, que  Calígine está asimilando de tan buena guisa.




    Una nueva "oficial" en el Puente de la Canaliega con un ambiente excelente.




   EL ARROYO DE LOS TORNILLOS DEL GUALAY, del que hay cierta controversia sobre el significado de su nombre y a la que nosotros queremos sumarnos.
   Para el CD "LOS ESCUDEROS" desde ahora este será el ARROYO NACIDO DE LOS SUEÑOS.




  Con decisión nos vamos hacia la desembocadura en el Guadalentín. Sólo hemos abandonado el agua, unos pocos metros, para descansar un poco los pies y conocer los restos del Cortijo de La Canaliega.




   Vistas de LA CERRÁ DE LA CANALIEGA, con parte del Collado Serval a la derecha, el Tranco del Lobo al frente y La Lancha del Sabinar a la izquierda. 




    Chaparro decide que hay que seguir perfeccionando, aquí dialoga con Macho Cabrio para que siga un plan de entrenamiento personalizado acorde con sus infinitas cualidades.




    Conforme nos acercamos al final del arroyo el cauce va aumentando.




    Halcón Peregrino, representa quizás la opción más fiable de medalla, su originalidad, junto a la seguridad a la hora de ejecutar los saltos, dan testimonio de ello. 




    El elegante Chotillo pasando por este estrecho paso que forma una sorprendente cueva. Con el tenemos el futuro asegurado.




    De repente Drago que posiblemente sea el tapado del equipo, nos ofrece un salto lleno de mareantes cabriolas, giros, volteretas y como remate esta espectacular entrada en el agua, en la que nos parece transmitir su deseo de fundirse con estas aguas impolutas del Gualay. Habrá que tenerlo muy en cuenta, para nuestro entrenador Chaparro, esto supone un bendito problema a la hora de tomar sus decisiones. 




   ¡¡¡PERO COMO ES ESTO¡¡¡, si todo se estaba desarrollando con gran armonía. Por lo que vemos en la foto, parecería como si el equipo quisiera destituir al gran Chaparro por la vía rápida. pero les puedo asegurar que no es lo que parece.





    Este es el complicado paso que nos va a permitir enlazar con la ruta de los pescadores del Río Guadalentín. Unos colegas amantes de la espeleología de Arroyo del Ojanco nos ofrecieron sus servicios para bajar, mediante cuerdas, pero no hizo falta. Con gran concentración y ayudándonos los unos a los otros logramos pasar sin apenas riesgo.




   Esta cueva está justo debajo del arriesgado paso.




    Córvido Carcávico relajándose tras tantas sensaciones seguidas.




    Zorro Ártico hace ya tres meses que entró en un nuevo club el de los PADRES, de ahí sus últimas ausencias. NUESTRA ENHORABUENA PAPÁ, 




   Alucinantes últimos metros del Gualay.




     Zorro Ártico y Halcón Peregrino siguen perfeccionando sus saltos.




    Ellos dos, junto a Córvido Carcávico, fueron los tres del grupo que transpasaron la cortina de agua y admiraron la cueva que se esconde tras ella. No la fotografiamos, ya que la declaramos zona protegida de cámaras. Por lo tanto el que la quiera ver que se introduzca.




  Si las olimpiadas fueran ahora, la medalla de oro estaría asegurada por parte de un eufórico Zorro Ártico, ya que se encuentra con la moral a tope. Impresionante salto.




   Hacia la desembocadura, dónde el resto del grupo ya lleva un buen rato.




   La desembocadura del Gualay con el Río Guadalentín.




     Unos metros más atrás nuestro fotógrafo es cazado.




   De nuevo todos juntos.




   Excepcional poza, una de las más profundas de todo el Parque. La violencia conque el Arroyo Gualay vierte aquí sus aguas la ha hecho posible. Se han medido hasta nueve metros de profundidad.




    Todo son calificativos de satisfacción por parte de los miembros de la expedición, como no podía ser menos ante tanta belleza.




   Los baños de larga distancia se suceden, no os podéis imaginar lo que estamos gozando.




   Hasta siempre ARROYO DE LOS TORNILLOS DEL GUALAY, verdadero capricho nacido de los sueños de los dioses.




   La enorme poza del Guadalentín vuelve a la calma, el que se sumerge en tus aguas alcanza a entender mejor la profundidad de los corazones de las personas, y los predispone para que por fin puedan convivir en perfecta armonía.




   Seguimos la ruta por "La senda de los Pescadores" Guadalentín arriba.




    El verbenero Macho Cabrío no deja el Río. Se ha tomado las instrucciones del entrenador al pie de la letra. 
  Como pueden ver el valle del Guadalentín nos ofrece cerradas fuera de lo normal.




    Seguimos por la senda arriba, a excepción de  nuestro compañero, que parece que está castigado, y sigue erre que erre por medio del río.




   Macho Cabrío ahora nos dice que sólo saldrá del agua si le prometemos que lo llevaremos a Río de Janeiro-2016.
 No tuvimos ningún problema para sucumbir a tan retador y piadoso chantaje. Venga vamos salte ya, que te vas a arrugar.




    En los últimos tramos de la cerrada.




   Al lado de estos remansos nos encontramos con este longevo fresno. A su lado vemos a Chotillo, el muchacho que gusta de hablar a los árboles.
 Ojalá otros muchos hicieran lo mismo y aprendieran a escuchar y entender su lenguaje. 




   En este lugar cerca del Vado de las Carretas, decidimos cambiarnos de nuevo de calzado, tras darnos el último chapuzón, que nos ayude a soportar las altas temperaturas en la subida, a esta hora tan calurosa.




    Como subimos a la izquierda del Guadalentín, nos encontramos de pronto con la desembocadura del Arroyo San Pedro ( lo forman los arroyos de la Garganta y el de La Rambla), este es el viejo puente que lo cruza, y que baja un buen caudal.




    Subiendo por la pista, inmersos en este autóctono bosque mediterráneo que en esta zona se resiste a sucumbir, ante la continua acometida de otros bosques invasores.




   Conforme subimos a la derecha se alza la Loma del Caballo de Poyo Manquillo que llega a los 1.628 m.




   Y llegamos a la zona de La Trinchera, cogiendo a la izquierda por esta pista que va desde la Nava de San Pedro a los campos de Hernán Perea.




    Ya de vuelta tras pasar por el cruce del empalme subiendo hacia el mirador nos encontramos con este magnífico ejemplar de gamo.



Longitud del trazado: 12 Km.

Duración: 6 horas y 30 minutos.

Grado de Dificultad:  Alta.

Agua: Llevar.